El primer elemento descubierto | Descubrimiento del fósforo

Un requisito previo necesario para la construcción de la tabla periódica fue el descubrimiento de los elementos individualmente. Aunque elementos como el oro, plata, estaño, cobre, plomo y mercurio se conocen desde la antigüedad, el primer descubrimiento científico de un elemento ocurrió en 1669 cuando Hennig Brand descubrió el fósforo.



¿Cómo lo hizo?

Quizás sea el método más desagradable para descubrir un elemento.

Recogió 60 cubos de orina (por contener fosfato) y los dejó reposar durante dos semanas. Pasado ese tiempo calentó la orina hasta el punto de ebullición y separó el agua, quedándose con un residuo sólido. Mezcló un poco de este sólido con arena, calentó la combinación fuertemente y recogió el vapor que salió de allí. Cuando el vapor se enfrió, formó un sólido blanco y cerúleo. Este sólido era fósforo.
¡Asombrosamente, aquella sustancia brillaba en la oscuridad! Por lo tanto,  fue bautizada como fósforo, que en griego quiere decir "portador de luz".

Hennig Brand no fue consciente de su descubrimiento pensó que había descubierto la legendaria piedra filosofal, un artículo que convertiría cualquier metal en oro y decidió mantenerlo en secreto.